¿Conoces la historia del Pitbull?

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Los ancestros más lejanos del actual Pitbull (American Pitbull Terrier), pueden encontrarse entre las filas de los ejércitos bretones, hace más de dos mil años. Cuando los romanos obtuvieron la victoria sobre los bretones, el emperador romano quedó tan impresionado por el poder de esos perros, que ordenó llevar ejemplares a la capital, para emplearlos en las arenas y coliseos en luchas a muerte contra otros animales o personas.

En Roma se mezclaron con otros perros propios de Italia, dando como resultado un perro todavía más poderoso, que en el futuro se extendería por toda Europa. Sin embargo, estos molosos de poderosa mordida todavía tenían muy poco que ver con el actual Pitbull.

La historia del pitbull

Durante los siglos X y XVII, proliferaron por Europa los espectáculos en los que los perros peleaban contra toros, por lo que los “abuelos” del actual Pitbull se hicieron muy conocidos y se extendieron con rapidez, dado que ofrecían un espectáculo vivo. También se extendió su uso para el trabajo entre los carniceros, que los utilizaban para mantener quietas a las reses mientras las marcaban a fuego, o para cansar y debilitar a los toros más bravos.

Cabe decir que lo más habitual era enfrentar a perros contra toros u osos, pero también proliferó, durante un tiempo, el hacer pelear al perro contra jaguares u otros felinos de buen tamaño. Dada la naturaleza de la batalla, se hacía necesario que el perro tuviese mayor agilidad, por lo que es empezó a cruzarlo con algunas razas de Terriers, con el fin de darle mayor velocidad y vivacidad. Sin embargo, estas mezclas no se extendieron demasiado, ya que no eran frecuentes las peleas entre perros y jaguares.

En 1835, el Parlamento Británico promulgó una ley que prohibía estas sangrientas peleas en las que se utilizaban perros, pero la gente continuaba deseando ver la sangre correr, así que se extendieron las competiciones donde se soltaba al perro en un foso lleno de ratas, y se contaba cuántas podía matar en un determinado tiempo. Puede verse un breve ejemplo de esto en la película “Gangs of New York”, por lo que, es probable (siempre que la ficción se realizara fiel a la historia) que este “deporte” se exportara a EEUU con bastante rapidez. Para este tipo de competiciones se utilizaban Terriers, aunque también tuvieron su lugar aquellos antiguos perros tipo Pitbull que habían sido cruzados con Terriers y, de hecho, durante este periodo, proliferaron.

Origines del pitbull

El nombre completo del Pitbull actual es “American Pitbull Terrier”. El nombre tiene la siguiente explicación: Los perros tipo “Bull” eran los que se utilizaban durante las peleas contra toros y osos (independientemente de la raza, era un nombre genérico). “Pit”, significa hoyo o fosa, por lo que se asume que se le introdujo ese término en el nombre cuando se utilizaron perros de tipo Bull para las competiciones de matar ratas. “Terrier” hace referencia al momento en que se mezclaron los Bulls con Terriers para obtener mayor agilidad. Todo ello dio como resultado al Pitbull Terrier. Pero… ¿Por qué American, si todo se desarrolló en Europa, más concretamente en Inglaterra?

La razón es sencilla: los Pitbull Terrier fueron llevados a América por los emigrantes que buscaban futuro en el nuevo continente, especialmente irlandeses. En EEUU aparecieron dos instituciones caninas, dedicadas a registrar nuevas razas y a hacer exposiciones. La primera y más antigua, fue la American Kennel Club, y la segunda, la United Kennel Club. La primera, en principio, se negó a registrar al Pitbull Terrier como raza, dado que era un perro conocido por usarse en las peleas de perros, y no querían relacionar la institución con ese tipo de actividades. Fue entonces cuando lo registró la United Kennel Club.

Y aquí es donde surge el problema para distinguir al American Pitbull Terrier del American Staffordshire Terrier. Al cabo del tiempo, la American Kennel Club, también aceptó a los Pitbulls como raza, pero bajo otro nombre, para no ser relacionados con las peleas de perros. El nombre que eligieron fue “American Staffordshire Terrier”, lo que condujo a que el mismo perro estuviese registrado en una asociación como American Pitbull Terrier, y en la otra, como American Staffordshire Terrier.

Años más tarde, la American Kennel Club, volvería a cerrar los registros de Pitbulls y no reconocería a la raza, pero sí seguirían haciéndolo la United Kennel Club y la ADBA (Asociación Americana de Criadores de Perros). Estas dos últimas organizaciones fueron la que desarrollaron los estándares del actual American Pitbull Terrier.

Años más tarde, el Pitbull se convertiría en la insignia de EEUU durante la guerra. Se utilizaba en las batallas, salvaba la vida a los soldados, enviaba mensajes y descubría a las tropas enemigas antes que los propios soldados. Incluso llegó a concedérsele varias medallas al valor a los Pitbull.

En la actualidad, la raza ha vuelto a ser estigmatizada dado que se ha vuelto común su tenencia entre dueños irresponsables. La FCI no lo reconoce como raza, por lo que para criar Pitbulls hay que seguir el estándar marcado por la ADBA.

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